El sueño que soñe ayer...

Soné un cuento hermoso, en el cual no había Hada madrina y mucho menos bruja malvada...

En mi cuento yo:
-Fui todo y nada a la vez
-Fui guionista, directora y productora
-Fui protagonista y antagonista
-Fui inicio, clímax y desenlace
-Fui juez y víctima
-Fui....lo que quise ser
-Fui esa que no soy yo, pero como me gusta ser

Un día, me dí cuenta que el final del cuento estaba por llegar, no tardaba el amanecer y con éste llegaría la cruel realidad.....mi despertar!

Dicen que soñar no cuesta nada, darnos permiso para soñar nos hace llegar a los lugares más recónditos, descubrir las ilusiones más profundas y porqué no hasta tocar el cielo. Pero, en algún momento tenemos que despertar para darnos cuenta que soñar, efectivamente es gratis, pero el despertar a la realidad SI CUESTA y más cuando extendiste las alas, volaste demasiado alto, se te cansaron las alas y emprendiste la caída de sopetón, cuando pensaste que la nube en la que andabas jamás se disolvería y que tu sueño siempre sería así claro, sublime y alcanzable.


Hoy al despertarme, me dí cuenta que mi sueño había terminado....que lo sublime que fue se convirtió en una horrible pesadilla, que si bien es cierto viví momentos exquisitos y de suma adrenalina también los tuve de desesperación y pánico. Quise gritar a los cuatro vientos todo lo que dejo en mi ese sueño tan hermoso, pero el miedo me hizo enmudecer, me dejo perpleja y sin fuerza para pronunciar las palabras que podrían haber descrito mi sentir.

Mientras duro fue genial, en mi sueño llamado cuento yo escribí el guión, yo decidí ser quien fui....y estoy orgullosa por ello, me permití ser quien normalmente quiero ser y no puedo: ESA QUE NO SOY YO, PERO COMO ME GUSTA SER!

El consuelo que me queda, es que siempre habrá más noches para soñar y días para despertar, que si el sueño del que desperté no fue lo que quise que fuera tengo otra noche para volver a soñar y cambiar la dirección, el guión y hasta la personalidad de la protagonista.